Gelatina de Champan y Disco de Chocolate blanco y huevas de salmón |
Estos son los típicos aperitivos super osea de la muerte, sorprendentes y fáciles de hacer. La combinación de dulce y salado, los colores, la mezcla de texturas, son perfectos.
GELATINA DE CHAMPAGNE Y CAVIAR
200 ml de cava
zumo de 1/2 limón
80 gr de azúcar
3 hojas de gelatina neutra
Como siempre empezamos hidratando las hojas de gelatina mientras calentamos el zumo de limón con el azucar y un poco de champagne (y una copita para la cocinera), lo justo para poder disolver el azucar.
Cuando empiece a hervir añadimos la gelatina escurrida y removemos hasta que se disuelva totalmente. Echamos el resto de cava despacio (y otra copa para la cocinera), mezclamos y vertemos en el molde seleccionado. Es importante que el resultado sea un bocadito pequeño, porque la gelatina de champagne puede llegar a empalagar.
Para terminar colocamos una cucharadita de sucedaneo de caviar sobre la gelatina y servimos.
DISCO DE CHOCOLATE BLANCO Y CAVIAR DE SALMON
No os voy a engañar, si encontráis unos discos de chocolate blanco ni tan dinos que se rompan enseguida, ni tan gruesos que parezcan una onza de Milkibar, no lo dudéis, compradlos y tenéis el aperitivo listo. Yo no los he encontrado, así que los hice yo misma. No es difícil, un poco coñazo, eso si.
Empezamos derritiendo al baño María 2/3 del chocolate que vayamos a usar, hasta alcanzar una temperatura de 28 grados. Apagamos del fuego y mezclamos casi todo ese chocolate con el tercio que hemos dejado antes y que habremos rallado o picado finamente. Mezclamos ambos chocolates hasta fundirlos y a la vez atemperarlos hasta alcanzar una temperatura de 24 grados. Finalmente añadimos el resto del chocolate que habíamos reservado al calor. Lo dicho, un coñazo.
Vertemos la mezcla en una manga, cortamos un pequeño pico y hacemos montañitas sobre un acetato dependiendo del tamaño que queramos conseguir en los discos. Cuando hayamos agotado la crema, cubrir con otro acetato y aplastar en forma de disco con una tapa cualquiera. Refrigerar hasta que se pueda separar de los acetatos. Se conserva bien en un tupper hermético en la nevera.
Lo dicho, si alguien encuentra esos discos a la venta que me lo diga, por favor.
Colocamos una cucharadita de caviar de salmón justo antes de servir.
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